Las plantas pueden ser una buena opción a la hora de decorar el hogar, ya que estas le pueden dar una sensación de armonía. 

Ahora, no es lo mismo conservar una planta en el interior a  la casa que en el exterior. También, dependiendo del estilo de planta que sea, se pueden requerir unos cuidados u otros. Por esto, se recomienda conocer los cuidados necesarios para que se puedan mantener bellas y en buen estado.

En definitiva, se trata de una tarea sencilla y económica, que necesita cierta dedicación y protección. A continuación, desarrollamos algunos tips importantes para el cuidado de las plantas en el interior del hogar.

A la hora de elegir una planta y cultivar

No todos los hogares son iguales. En algunos lugares hace mucho calor mientras que en otros hace frío. Hay hogares grandes, otros pequeños; con mucha luz o poca luz. Es importante tener en cuenta todos estos factores a la hora de elegir la planta que quieres tener en tu casa.

Del mismo modo, es importante preguntar acerca de las plantas que pueden ir bien en interiores y las que son especiales para exteriores. Esto será importante a la hora de decidir dónde colocar la planta.

Por ejemplo, las flores son muy recomendadas para decorar el hogar por sus colores cálidos y de una a otra manera elegantes. Las más sencillas suelen ser muy bonitas, como las rosas, las margaritas, las estrellas de velen, o los girasoles.

Cómo sembrar una planta

Si vas a trasplantar la planta de una maceta a otra debes tener bastante cuidado. Ya que muchas veces las plantas son puestas en un recipiente más pequeño o más grande del que realmente necesita.

La tierra que debes escoger tiene que ser una especial  para plantas de interiores. No puedes tenerla en una tierra de jardín ya que esta es muy gruesa y puede impedir que las plantas respiren adecuadamente.

Del mismo modo, es importante regar minuciosamente las plantas cuando se vea que la tierra está totalmente seca.

A la hora de regar y abonar la tierra

Esta actividad es vital para que las plantas crezcan y se mantengan con vitalidad. Aunque puede ser una acción básica, necesitas tener algunas cosas en cuenta.

Por ejemplo, no es recomendable regar en exceso, es algo que se debe hacer regularmente y de forma acorde a lo que necesita la planta. Preferiblemente con un rociador para que tanto las hojas como las raíces puedan ser regadas.

La hora más recomendable para regar una planta es en la mañana. Ya que el clima está fresco y el agua no se va a evaporar tan rápido como cuando hay mucho calor.

También debes cuidar que el agua no esté ni caliente ni muy fría. Puedes hervir el agua y dejarla un día en reposo para que esta se ponga en temperatura ambiente, esto va hacer que se elimine el cloro del agua y que a la hora de regar las plantas estas no tomen un color negro en el borde de las hojas.

Para fertilizar la tierra existen dos tipos de abonos, los orgánicos y los fertilizantes naturales. Es posible crear un abono natural propio con algunos desechos de cocina. Como por ejemplo la cascara de huevo o utilizando verduras.

A la hora de aplicar insecticidas

Tu planta debe estar protegida de hongos e insectos para que se mantenga en buen estado y pueda crecer o conservarse sanamente.

Es posible realizar algunos insecticidas caseros, por ejemplo con ajo. Se deben triturar 4 dientes y dejarles reposar en un litro de agua por una semana.

Entonces aplícale el producto a la planta con un rociador. Si ya la planta está afectada hazlo especialmente en aquellos logares que presentan evidencia de daño, esto va a servir para combatir ácaros, hongos y chiches.

Se recomienda que las plantas se pongan en algún sitio donde le lleguen los rayos UV. Esto es para nutrirlas y acelerar su crecimiento. Ubica las plantas muy cerca de una ventana para que le llegue el sol. Debes cuidar que no le lleguen estos rayos directamente a la planta, se recomienda colocarla en un lugar en el que de la luz.